NUNCA ME ABANDONES
(Soneto)
Y que sea por siempre el más gozoso
este recién nacido idilio puro
pues no ha de separarnos ningún muro
que alguien con osadía alce enojoso.
Y vuelva este romance algo dudoso,
dejándonos tan tristes, sin futuro.
Y por eso insistente yo procuro
alejarnos de todo lo estorboso.
Un fuego de maldad levantará
airado contra nuestras ilusiones
mas su llama el amor derribará.
Nada hemos de temer, alzo oraciones
que al enemigo lejos echará,
amado eterno nunca me abandones.
INGRID ZETTERBERG