CONVÉNCETE YA
(Soneto)
Hasta conseguir este anhelo mío
no cesarán los ruegos de mi pecho
que arrodillada junto a nuestro lecho
voy elevando a Dios en quien confío.
Mas con gran desespero desvarío,
porque entretanto a veces yo sospecho
que seguirás herido por despecho
por eso te has mostrado tan tardío;
Y esa será razón de tanta ausencia
que día y noche me haces padecer
¡Vuelve ya! que por ti muere mi ser,
y convéncete ya de mi inocencia;
al Eterno he pedido su clemencia
porque Él sabe que grande es mi querer.
INGRID ZETTERBERG